jueves, 28 de mayo de 2009

Naipes, humo y refresco


Recuerdo cuando todo era bello y vivía bajo el hermoso manto protector de mi madre.
Hubo un tiempo en el que pasabmos por lo menos 2 noches a la semana jugando Continental y era de LEY que llamara a mi prima y empezara el gorgoreo cual gallinero.
Primero (a veces un día antes) se hacía la invitación formal a la casa
- Prima vienes a jugar cartas mañana (viernes) por la noche o puedes hasta el sábado- Esperaba una respuesta breve...
- ¿Qué me toca llevar, puedes pasar por mi? - Eso era un si definitivo y let de show beggins!!!

Si no pasaba por ella a su casa, por lo general la llevaba alguien, y era típico el bla bla bla con mi mamá y hola prima wara wara... Yo preparo la mesa mientras ustedes van por provisiones. Y ahí estabamos montadas en la super nave de mi madre contando los dineros con dirección al Oxxo más cercano. Mientras nos poníamos al tanto de las noticias que las madres no suelen escuchar, nos movíamos como el demonio de Tazmania por el oxxo agarrando las provisiones, la coca de 3 litros (2 ó 3 dependiendo el número de días que duraría el evento), fritos, papas, cigarros (varios) cheetos y no recuerdo que tanta madre comprábamos pero weno.

De ahí a la casa y entrando mi mamá abría un refresco, se lo servía con muuuucho hielo, ponía los fritos en un bowl (rojo o amarillo) y se sentaba en su lugar..
Cada una tenía su lugar, y empezábamos a jugar, las horas pasaban, la música sonaba, las risas, la hora del lonche o el break, el pipis time and so on, and so on.. y la Prima siempre diciendo que le hacíamos trampa, o quejándose porque no podia sostener 2 mazos de cartas que deberían de estar en la mesa y no en sus manos. Claro que cuando ella ganaba tenía qué soportarla hasta que volviera a perder.. lo cual no era mucho la mayoría de las veces.

En esos tiempos, ya ahora años de eso, la vida era a penas algo vislumbrable y no había de qué preocuparse.

Extraño esos tiempos.

Prima vámonos a cuerna que mi mamá nos espera!!!

2 comentarios:

Moka Hammeken dijo...

Ahaaa esos días y noches enteras de las jugadas de continental. Que siempre me cambiaban las reglas ¡Tramposas! pero aún así ganaba. Eran divertidos la escena se me antoja como la del cuadro de los perros jugando poker.

Todo buena onda

Unknown dijo...

Ajajajaja Ciertamente mi querida padawan... ciertamente.
La verdad es que fueron buenos momentos, laaaaaargas noches y días!! oh si lo recuerdo bien.